El Ferrari F2007 es el último bólido salido de Maranello que se ha proclamado campeón de Formula 1. Eso significa que la escudería del Cavallino Rampante, la más veterana y laureada del paddock, lleva seis años viéndole la matrícula al menos a otro monoplaza. ¿Y quién estaba a los mandos de aquel coche que salva el honor de Ferrari en esta década ominosa? Quién va a ser, Iceman, el Hombre de Hielo, el único, el inigualable, el impertérrito Kimi Raikkonen. El finlandés ha tenido que volver al equipo italiano a ver si rascan bola de una vez.
Aquel F2007 campeonó a pesar de que Ross Brawn se iba de año sabático esa temporada, y lo logró principalmente por la larga distancia entre ejes y el acertado reparto de pesos. No es cuestión baladí porque ese año la FIA introdujo novedades en la reglamentación de los monoplazas en cuestión de seguridad que incrementaba el peso del vehículo. Sus innovaciones aerodinámicas –que saltan a la vista en su réplica para slot– hicieron el resto para ganar pujanza en el Mundial de F1. Tanta que McLaren incurrió en espionaje y fue apartada de la clasificación de constructores.
Ese año la Scuderia obtuvo nueve triunfos, seis de Raikkonen y tres de Felipe Massa (que todavía ganaba carreras en 2007... ¡y hasta en 2008!). De todas ellas, la más dulce fue en el Gran Premio de Brasil, con doblete incluido, porque valió el título de campeón en la última carrera de la temporada. Mientras Fernando Alonso y Lewis Hamilton libraban su particular guerra civil, Iceman sonreiría (si supiera gesticular) al recibir la bandera a cuadros.
0 comentarios :
Publicar un comentario
Deja tu opinión aquí. No se requieren buenos modales, aunque se agradecen.