Niki Lauda ganó tres mundiales de Formula 1. Compitió durante ocho años en su primera etapa y, tras una breve retirada, regresó por cuatro años más. Estuvo al volante de un Ferrari en sus años más gloriosos (y también discutidos, como pone de manifiesto la reciente película Rush), y se sentó asimismo en un McLaren y en un March y en un BRM y en un Brabham. Una carrera dilatada. Pero nunca Renault. Esta es otra de las grandes cosas que tiene el modelismo, que reproduces a escala, con la mayor precisión posible, vehículos reales, pero también te permiten montarte tu propia fantasía. Y les pongo un símil futbolístico (el fútbol sirve para explicarlo casi todo): durante varios veranos, Dennis Bergkamp iba a fichar por el Real Betis, pero no terminaba de venir a la Liga española porque le daba miedo volar en avión, mientras que en la Premier League se desplazaba en tren para los partidos de visitante con el Arsenal. Durante todas esas tardes muertas de las vacaciones escolares, soñábamos con el genial holandés vistiendo la camiseta verdiblanca, pero eso sólo pasaba en nuestra cabeza. Con Niki Lauda pasó igual, Manuel Jesús Ríos lo tuvo en Renault para correr en los campeonatos de slot de los años 70, pero sólo él.
Esto va a gustarte
-
El embrague es una de esas piezas de desgaste que terminas cambiando obligatoriamente cada 100.000 o 150.000 kilómetros y que es fundam...
-
¿Cómo sacarle partido a algo tan grande como convertirse en el surtidor oficial de la principal competición de motor en Brasil , la Stoc...
-
Usar agua del grifo en lugar de líquido refrigerante es un asunto más grave de lo que parece. Algunos piensan que en realidad es otra ...
-
Toyota ha recurrido a un rostro anónimo para anunciar su nueva gama de automóviles híbridos. Un rostro serio. Habréis visto el anun...
-
Como sabemos que os puede la tecnología, que a poco que Adrian Newey se saca una innovación de la manga le hacéis la ola, pero que tam...
Contacta
@Retahila.es. Con la tecnología de Blogger.
0 comentarios :
Publicar un comentario
Deja tu opinión aquí. No se requieren buenos modales, aunque se agradecen.